Una opción perfecta de entretenimiento estos días, sobre todo si tienes pequeños en casa con ganas de jugar, es cocinar. Padres, madres e hijos pueden preparar en equipo entrantes, carnes y pescados variados, o incluso postres, y hacer así más llevadera las semanas que nos quedamos en casa.

Cocinar con niños puede ser, además, una actividad muy divertida, con la que no solo conseguirás entretenerlos y pasar un buen rato en familia, sino que los más pequeños de la casa también tendrán un contacto directo con los alimentos y aprenderán que, aprovechándolos al máximo, pueden convertirse en comidas deliciosas y saludables. Sigue leyendo y descubre algunas ideas variadas, divertidas y saludables para elaborar recetas de aprovechamiento en familia.

Pica-pica saludable y divertido
Estos días en los que permanecemos más tiempo en casa confinados, es posible que piquemos más entre horas y con mayor ansiedad. Además de intentar controlar las comidas entre horas, existen varias opciones de picoteo saludable que pueden preparar hasta los más pequeños, siempre con la ayuda de un adulto.

Palitos de serpiente
Se trata de realizar palitos con forma de serpiente que se pueden hacer con una masa de hojaldre o de pizza. Se estira bien la masa, se corta en tiras y se enroscan en un palillo. A continuación, se colocan los palitos de serpiente sobre una fuente cubierta con papel de horno. Se pincelan los palitos con aceite, se espolvorean con un poco de sal y hierbas aromáticas, y en la punta se coloca media rodaja de aceituna negra para hacer los ojos de la serpiente, y un trozo pequeño y alargado de pimiento para la lengua. Se hornea en el horno, precalentado, hasta que queden bien doradas.

Croquetas variadas. Un clásico que no falla
Las croquetas se pueden preparar de casi todos los alimentos que imaginemos: carne, pescado, vegetales, etc. Además de ser una gran receta de aprovechamiento, su elaboración puede ser como un juego para los niños. Al ser una receta elaborada que requiere de varios pasos (preparar la masa, bañar en huevo, cubrirlas de pan rallado, etc.) la idea es enfocarla como un circuito para que cada miembro de la familia se encarga de uno de los pasos. Participarán todos los miembros de la familia, darás responsabilidades a los más pequeños e incentivarás el trabajo en equipo.

Pizzas con pan de pita. El éxito está asegurado.
De todas las propuestas para cocinar con niños, esta es una de las que más éxito tiene porque pueden participar en casi todo el proceso y hacer “dibujos” en la masa con los ingredientes. Con un pan de pita integral, una base de salsa de tomate natural o hummus, añade un poco de queso, una variedad de verduras (cebolla, pimiento, calabacín, tomate, champiñones, etc.). Añade a continuación la proteína con unos dados de pollo, pavo o atún. Es una receta rápida de preparar con la que conseguirás un plato saludable y delicioso en pocos minutos.

Rollitos de jamón y queso. Un tentempié saludable y delicioso.
Se pueden elaborar solo con el jamón y queso o acompañarlos con masa de pizza, una alternativa que seguro que les encantará. Los rollitos pueden ser crudos o se pueden cocer un poco a la plancha para darle un toque tostado y conseguir que el queso se funda un poco más. 

Galletas saladas con forma de estrella. La merienda más divertida.
Esta receta es perfecta para preparar en familia y con niños y niñas pequeños, ya que es como un juego y, al mismo tiempo, un aprendizaje. Con ella, verán que pueden darle una forma divertida a una masa que ellos mismos han participado en su elaboración y que luego se transforma en unas galletas buenísimas. Se puede utilizar un cortapastas con forma de estrella, pero se pueden usar otros moldes con forma de flor, de corazón o de animales para que se diviertan aún más creando las formas.

Piruletas heladas de plátano: un postre sencillo y muy saludable
Las piruletas heladas de plátano es una receta divertida y saludable para los más pequeños y para toda la familia, ya que se trata de un sencillo postre helado en el cual solo son necesarios plátanos y yogur, nada más. Volcamos el yogur mezclado con los trozos de frutos secos, fresas o cualquier otra fruta que pueda combinar. Paralelamente pelamos los plátanos, los cortamos por la mitad, introducimos el palo de helado por la base cortada y lo sumergimos en el yogur. Se puede acabar de decorar con virutas de chocolate o con un topping al gusto. A continuación, los introducimos en el congelador y esperamos a que se hielen para disfrutar de los helados.